En todos los años que llevo visitando las ferias de Portugal, y van más de 40, creo que no lo había hecho antes en época navideña, o al menos, no lo recuerdo. El puente de la Constitución resultó ser una buena excusa para volver (he perdido la cuenta de las visitas de este año) al país vecino….no nos engañemos, no hace falta ninguna excusa. Sí es cierto que me hacía especial ilusión este viaje porque quería probar un restaurante que encontré buceando en Instagram, gracias a @lorecomiendo.
El restaurante Casa das Velhas en Vilanova de Cerveira era el objetivo, la novedad, y reconozco que ha colmado con creces las expectativas. La pena fue el mal tiempo que nos impidió disfrutar de las espectaculares vistas.
Estas imágenes son de la cuenta de Instagram del restaurante, ahora os enseño las que nosotras hicimos allí a nuestros platos. Nosotras, las feirantas, somos mi madre Trini, mi amiga María y yo. Adictas a las compras en las ferias, a Portugal y al bacalhau, unas más que otras dependiendo del objeto de la adicción.
La decoración, la vajilla y cubertería, la cristalería, todo estaba a nuestro gusto. El ambiente también. Quizás por la época del año, la clientela era en su mayoría local, algo a lo que no estamos acostumbradas en nuestras visitas habituales a las diferentes ferias.
Para empezar nos tomamos unos folhados rellenos de queso de cabra, deliciosos. Después vino la ensalada de ventresca, para equilibrar, el bacalhau y cabrito.
Tenía miedo a no pasar la exigente prueba de mi madre con su plato favorito… más que eso, su verdadera excusa para cruzar la frontera cada cierto (poco) tiempo. Y digo que tenía miedo, porque me había enamorado del restaurante y sin habernos marchado ya tenía ganas de volver. Hubo suerte, el bacalhau de Casa das velhas pasó el corte de la jefa, así que repetiremos.
Desde aquí, gracias a Casa das Velhas por su trato, ¡volveremos! Y gracias a @lo_rrecomiendo por este regalo.
#cadadiaesunregalo con @tasteatandenjoy
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